Esencialmente, la primera ley de Newton, también llamada Ley de inercia, implica: Un cuerpo no es capaz de cambiar por sí solo el estado en el que permanecía inicialmente; a menos, que se le aplique algún tipo de fuerza neta sobre él.
De manera que, un cuerpo que esté en reposo, se puede entender que su velocidad es igual a cero, y si la velocidad cambia, significa que se ha ejercido una fuerza sobre él. Las leyes de movimiento, son llamadas así en particular por ser aquellas que explican ciertos criterios o principios utilizados en la dinámica.
Éstas, se dividen en tres teorías denominadas: Primera, segunda y tercera ley de Newton.
Principio fundamental de la Dinámica
Principalmente, la segunda ley de Newton implica que: La fuerza que logre actuar sobre un cuerpo es proporcional a la aceleración que pueda tener. Es decir, para que un cuerpo pueda trastornar su movimiento, es necesaria la existencia de algo que promueva su cambio. Por ejemplo, una fuerza.
Por otro lado, la segunda ley de Newton explica que la fuerza total ejercida sobre un cuerpo determinado, resulta proporcional a la aceleración que consigue dicho cuerpo.
Tercera ley de Newton o Principio de acción y reacción
Básicamente la tercera ley de Newton explica que si un cuerpo determinado es capaz de ejercer una acción sobre otro determinado cuerpo, el segundo cuerpo es capaz de realizar sobre el primer cuerpo, otra acción igual y de sentido contrario.
Esta ley es usada diariamente y a veces sin tener conocimiento sobre qué se está llevando a cabo. Como es el caso de intentar saltar hacia arriba, la reacción del piso es aquella que logra que la persona pueda saltar hacia arriba.
Y de esta manera, se entiende que toda acción conlleva una reacción que ocurre de manera contraria a su acción.
Aprende más sobre las leyes de Newton